Selección
y uso de Equipos de Protección Individual en Laboratorios
Debido a la naturaleza del trabajo en
laboratorio, los Equipos de Protección Individual son de uso habitual. Pese a
ello, las recomendaciones para las situaciones de trabajo rara vez son
especificadas. Este artículo analiza las situaciones más habituales de
selección y uso en este contexto.
Los laboratorios son entornos más o menos
controlados en los que los usuarios de los mismos están expuestos a diversos
tipos de riesgos: exposición a productos químicos, exposición a
microorganismos, riesgo de incendio, manipulación de material a presión, etc.
El control de estos riesgos pasa en primer lugar por el cumplimiento de la
legislación aplicable, como el RD 379/2001 sobre almacenamiento de productos
químicos, el RD 374/2001, sobre la protección de la salud y seguridad de los
trabajadores expuestos a agentes químicos, la eliminación del riesgo mediante
los procedimientos contemplados en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales,
etc. Sin embargo, hay situaciones en las que el uso de Equipos de Protección
Individual (EPI) se hace necesario. En estos casos, la mayoría de los manuales
y guías de seguridad en el laboratorio suelen indicar que se hace necesario el
uso de EPI para la protección de las vías respiratorias, ojos y cara, manos y
vestuario de protección, sin más especificación que el consabido “adecuado”, es
decir, úsense gafas adecuadas, vestuario adecuado, etc. . En este artículo,
pese a que no haremos una aproximación exhaustiva, intentaremos ser algo más
precisos a la hora de designar los EPI necesarios para la mayoría de
situaciones que podemos encontrar en un laboratorio. Fundamentos para la
selección Cuando se ha tomado la determinación de hacer uso de los equipos de
protección individual, la selección y uso de los mismos debe hacerse según lo
dispuesto en el RD 773/1997 sobre la utilización de EPI por los trabajadores.
En la Ilustración 1 se dan algunas indicaciones orientativas de los distintos
pasos a tener en cuenta a la hora de la selección y uso de los EPI. A
continuación pasaremos a comentar de forma muy breve cada uno de estos pasos.
Identificación y evaluación de los riesgos En esta fase, el personal competente
en prevención de riesgos laborales deberá identificar y evaluar los riesgos a
los que se enfrentan los trabajadores del laboratorio. De forma resumida, la
exposición a sustancias químicas y a microorganismos, quemaduras térmicas,
electrocución, y los riesgos derivados del almacenamiento de sustancias
químicas son las principales amenazas a identificar y evaluar. Como se indica
en el RD 773/1997, los riesgos que no puedan ser evitados o limitados
suficientemente deberán ser analizados y evaluados. En cuanto a la exposición y
manejo de sustancias químicas y microorganismos, las principales vías de
entrada al organismo son la vía dérmica, la inhalatoria y la ingestión de estas
sustancias. Definición del EPI necesario Una vez identificados los riesgos, la
definición correcta de los EPI necesarios, pasa por un conocimiento de la
normativa aplicable a los EPI, los requisitos que exige cada norma para un tipo
de EPI determinado, la relación de estos requisitos y las particularidades de la
tarea a realizar, y también las particularidades del propio trabajador. Por
último, hay que encontrar estos EPI definidos en el mercado,…¡y asegurarnos de
que cumplan con los requisitos de salud y seguridad del RD 1407/1992! De forma
esquemática, la normativa aplicable a los EPI más comúnmente utilizados en el
laboratorio se muestra en la Ilustración 2. En este esquema sólo se ha hecho
mención a algunas de las principales normas de los equipos que ofrecen
protección al usuario frente a la exposición a sustancias químicas y
microorganismos. En el caso particular de la protección respiratoria, las
posibles combinaciones de adaptadores faciales (máscaras completas, medias
máscaras, cuartos de máscara, capuchas, cascos, etc.), de filtros (de
partículas, de gases y partículas) y de fuentes de suministro de aire (líneas
de aire/ botellas de aire) llevan asociados distintos factores de protección y
características funcionales, y nos extenderíamos demasiado haciendo una
enumeración más exhaustiva de toda la normativa aplicable. Por ello sólo se han
nombrado algunas de las normas aplicables a estos equipos. Por otro lado, en
este esquema tampoco se hace mención a los distintos niveles de protección que
describe cada norma. La correcta definición del nivel de protección adecuado al
nivel de riesgos evaluado es fundamental para proporcionar una protección
adecuada al usuario, evitando así tanto la sobre-protección como la
sub-protección. Herramientas de selección El primero de los problemas a los que
se suele enfrentar el prescriptor de EPI es el desconocimiento de la normativa
aplicable y de los requisitos que cada norma describe para cada tipo de EPI.
Para asistir a los usuarios de EPI en esta tarea, ASEPAL ha venido editando a
lo largo de los años la Guía de Selección de EPI, un documento en el que se
describen los requisitos aplicables a cada tipo de EPI en función de su
normativa correspondiente. La Guía de selección de EPI también incluye fichas
que asisten al usuario a la hora de seleccionar los distintos equipos de
protección, como es el caso de los equipos de protección respiratoria,
auditiva, y protección ocular. La Guía puede adquirirse y consultarse a través
de la web de ASEPAL: www.asepal.es El RD 773/1997 obliga a que los EPI que se
usen cumplan con la legislación vigente en materia de seguridad de producto.
Ante un mercado de EPI donde los productos no certificados no son una anécdota,
el usuario se enfrente al problema de no saber “cribar” los EPI certificados de
los no certificados a la hora de acudir al mercado para la adquisición de los
equipos. Para responder a esta necesidad a los usuarios en esta tarea, ASEPAL
ha puesto en marcha un Directorio de EPI Certificados, que de forma on-line
pueden acceder a casi 900 productos debidamente certificados. La herramienta
dispone de criterios de búsqueda basados en los niveles de prestación descritos
en la normativa a para facilitar la tarea a los usuarios de la búsqueda de los
EPI cuyas características ya han definido previamente. El Directorio incorpora
también información (mucho más resumida que la de la Guía) acerca de la
normativa aplicable a los EPI, y puede consultarse de forma totalmente gratuita
y abierta a través de la web: www.asepal.es Uso de los EPI El mejor EPI del
mundo no ve mermada seriamente su efectividad y capacidad de protección si no
se utiliza adecuadamente. El fabricante debe definir en el folleto informativo,
entre otras cosas, las condiciones de utilización y mantenimiento de los EPI.
Es por ello que este documento cobra una importancia crucial a la hora de
proporcionar a los trabajadores el nivel de protección adecuado. La formación a
los trabajadores en el correcto uso de los EPI es, por tanto, otro de los
pilares fundamentales de la protección laboral. Conclusiones Para una correcta
selección de los EPI de uso en el laboratorio, será fundamental la
identificación y evaluación previa del tipo y nivel de riesgos frente al que
nos enfrentamos. A continuación, dependiendo del nivel de riesgos evaluados,
deberemos definir los niveles de protección de los EPI, y para ello deberemos
conocer la normativa aplicable correspondiente. En esta labor, la Guía de
selección de EPI puede prestar al usuario una inestimable ayuda técnica. Por
otro lado, el Directorio de EPI certificados, permitirá al usuario hacer la
selección de los equipos pre-definidos con la seguridad de acceder únicamente a
productos certificados. Ambas herramientas pueden son accesibles a través de la
web de ASEPAL: www.asepal.es Por último, la protección de los trabajadores no
será completa si estos no reciben la adecuada formación en el uso de los EPI
que se han sido prescritos para ellos.
Tomado de la WEB
Tomado de la WEB